Lo que sucede hoy al interior de Morena Chiapas en torno a la figura de Sasil de León Villard es un asunto que podría terminar muy mal para la controversial senadora con licencia. Y es que, Sasil no sólo ha decidido intentar sabotear abiertamente los resultados del proceso interno, sino además utilizar su posición para imponer las exigencias de su padrino (Manuel Velasco) dentro del reparto de candidaturas.
Según trascendidos emanados de los pasillos morenistas, la alfil de Velasco ha puesto sobre la mesa numerosas exigencias, entre las que destacan al menos cuatro diputaciones para su familia y recomendados del ex gobernador chiapaneco. Sus hermanos, Yumaltik y Alfredo, involucrados en el saqueo millonario durante el gobierno verde en Chiapas, están por supuesto dentro de la lista.
La molestia dentro de las bases morenistas tiene que ver justo con “el juego” que De León Villard está aplicando para imponer nuevamente los intereses de Velasco dentro del proceso interno estatal, buscando desplazar a candidatas y candidatos de consenso real y mayores posibilidades electorales, sin importar poner en riesgo a las candidaturas legislativos de Morena, con tal de garantizar espacios y fuero a sus recomendados.
Por eso el descontento al interior de partido y sus aliados, para quienes Sasil de León se ha convertido ya en una figura bastante incómoda, con numerosas acusaciones de corrupción y saqueo durante su paso por la Secretaría de Desarrollo y Empoderamiento de las Mujeres que, en una de esas, terminan complicando su futuro próximo.
